
Acabo de recibir un correo electrónico de un Perito ofreciendo sus servicios, y en el mensaje aparece la siguiente frase (que copio y pego, tal cual):
- Condiciones de las Tasaciones: Nuestras tasaciones se realizan con total parcia-
lidad y sin consideramiento para ninguna de las partes.
La verdad es que no sé cómo tomármelo.
Si hace su trabajo con total parcialidad, ya no me sirve como perito, pues la Ley de Enjuiciamiento Civil dice claramente que todo perito deberá manifestar, bajo juramento o promesa de decir verdad, que ha actuado y, en su caso, actuará con la mayor objetividad posible, tomando en consideración tanto lo que pueda favorecer como lo que sea susceptible de causar perjuicio a cualquiera de las partes...En otras palabras, según la ley, el perito debe actuar imparcialmente.
Claro que, releyendo la frasecita, cuando dice que hace su trabajo sin consideramiento para ninguna de las partes esto parece una contradicción, pues si es (como dice en la primera parte de la frase) parcial supongo que habrá tenido más consideración hacia alguna de las partes que frente a la otra. Pero si me dice que no tiene consideración para ninguna, eso parece querer decir que es imparcial.
No obstante, si resulta que es un perito parcial (o sea, que hace lo que se le pida, independientemente de las bases técnicas), pues es una tentación saber que ahí está alguien dispuesto a desafiar las leyes de la física, o de la química, o de lo que sea, en favor de una causa digna de elogio: la defensa de un ciudadano.
Pero ocurre que si el perito escribe como escribe, ¡pues ya no sé qué va a decir en su informe! Igual concluye que el fallecido murió porque estaba muerto, o algo así.
Ya sé que si el perito es Ingeniero no tiene por qué ser un Lord Byron, ni un Shakespeare. Pero lo que también sé es que para ser Ingeniero (o abogado, o médico, o lo que sea), antes se tiene que haber cursado una carrera universitaria, y antes haber estar escolarizado. Y resulta que en la escuela te enseñan a leer y escribir (además de otras menudencias). Y como un servidor ha leído un Informe de la UNESCO en el que se expone el alarmante crecimiento de centros (incluso pseudouniversitarios) que ofrecen títulos falsos, pues me entran los temblores, qué queréis que os diga. Temblores porque los peritos son elementos cruciales en un juicio. Tan es así que muchas veces, más que sobre cuestiones jurídicas, algunos juicios versan sobre cuestiones técnicas que hay que delegar en los peritos, para que analicen los hechos, busquen causas e imputaciones y, sobretodo, expliquen de manera comprensible para un no experto sus estudios.
Dejemos aquí la cuestión, y ya volveremos otro día sobre el tema de los peritos y algunas de sus aportaciones para los anales de la justicia.